El Ángel, película inspirada en el homicida serial Robledo Puch


Partimos del acuerdo de que la película no es un biopic de Carlos Robledo Puch, nacido en 1952, sino que utiliza recursos artísticos y poéticos mostrando otra cara de un asesino. Inspirada en los testimonios y documentación existente en la causa penal, lejos de defraudarnos, el film permite descubrir una personalidad hipotética diferente a la que podría residir en el inconsciente colectivo sobre un homicida serial. Quizás este autor de 11 asesinatos, se nos represente como un ente oscuro, desequilibrado mental, análogo a un animal y con impulsos irrefrenables de dominar y torturar presas.

Muy por el contrario, se le exhibe al espectador un personaje con la inocencia de un niño, cuyo móvil no es el dinero, la fama ni la dominación. Para Carlitos, desde su nacimiento no existen barreras reales entre lo posible y lo imposible , entre “esto es tuyo y esto es mío” y esta candidez se refleja en cada uno de sus actos. Su ser, que no registra siquiera los límites autoritarios de un Estado rectificador cívico militar, desenfadado aprieta el disparador y también danza al rimo de El extraño de pelo largo.


Desde el punto de vista de la Teoría Positivista Lombrosiana, con bases biologicistas que vinculan la fealdad con el mal inherente al ser humano, “El Ángel” rompe con ese paradigma para despojar a la sociedad de la respuesta que más fácilmente le calza a la pregunta más difícil: ¿Por qué un ser humano desvía su conducta?.

Su fama se forjó en los titulares de la época como “el niño bien”, el joven de menos de 20 años que a pesar de provenir de una buena familia había equivocado el camino. Arrancadas todas las respuestas: no era la mala crianza, no era el barrio, no eran los libros, no era el ADN, volvía el positivismo a intentar dar batalla ¿podía ser la homosexualidad la causante de sus aberraciones?.

Reflejo de una época retro en la que, sin olvidarnos de los delitos de cuello blanco, el delincuente tenía que ponerle el cuerpo al crimen. Un cuerpo con cara anónima, alejado de la masividad que hoy dicta el mainstream del “social media” y en un mundo post Teoría del Panóptico, atravesado por un ojo que todo lo ve. No volvería a gestarse en nuestros tiempos otro Ángel de la Muerte: Carlos Robledo Puch, se convierte en un disruptor de paradigmas socioculturales de edición limitada.

"Todos tenemos un destino, yo soy ladrón de nacimiento"- El Ángel


Los actores y actrices protagonistas - Lorenzo Ferro, Chino Darín, Mercedes Morán, Daniel Fanego, Luis Gnecco, Peter Lanzani, Cecilia Roth - trabajan y ensamblan distintos roles frente a los hechos, seduciendo al espectador, quien podrá replantearse muchos de sus prejuicios. Bajo la dirección de Luis Ortega, el film traslada hacia etapas estética y musicalmente bellas de la Argentina de forma excepcional.

Autora: Claudia Venturini, Licenciada en Criminalística.
Buenos Aires, Argentina.

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